Ante el advenimiento de la irracionalidad que ha invadido todos los ámbitos de la cultura y la sociedad en los últimos años; es nuestro objetivo contribuir desde los ámbitos del arte y de la cultura a recobrar la cordura y el sentido común. Queremos aportar nuestro granito de arena en esa labor de restaurar el amor y el interés genuino por todo lo relacionado con las artes, la literatura, la imaginación y la creatividad.
En otras palabras, abogamos por la restauración de las tan denostadas y vilipendiadas Humanidades. Sí, porque éstas al abarcar todas las disciplinas que afectan al espíritu, han contribuido a hacer de los seres humanos a través de la historia, personas dignas, pletóricas de sensibilidad, bondad, amor, sentido común y un profundo anhelo por todo lo trascendente. Personas con ilusión y esperanza, que han mantenido siempre un pie anclado en tierra, pero otro elevado y dirigido a la búsqueda de lo sublime, lo bello, lo trascendental y divino. Asuntos que con el demoledor ímpetu del postmodernismo, en los últimos años han sido substituidos por todo lo vil, vulgar, burdo y chabacano.